jueves, 24 de mayo de 2007

A veces una “X” sí marca el lugar

Entre los grandes grupos que se dieron a conocer en la década de los 80 podemos decir que existía una característica común. Todos compartían grandes canciones, generalmente hit singles, discos excepcionales, elaborados, concebidos en conjunto y no como una caja de pandora que contuviese dos o tres éxitos y canciones de relleno. Además tenían una absoluta entrega al directo. En este último apartado pesaba que eran bandas creadas para tocar en vivo (no eran productos prefabricados) y que sabían escoger el rol de cada miembro del grupo en beneficio del conjunto. Bien es sabida la historia de que al principio Bono era el guitarra principal de U2, pero que, muy a su pesar tuvo que ceder a la presión de Adam y Larry y dejar que The Edge se encargara de las seis cuerdas, lo que llevó a Bono Vox a empezar a cantar. De sobra es conocido el resultado…

A la hora de escoger las funciones de cada miembro, los grupos eran coscientes de que siempre, a pesar de lo que se diga, el 90% de la atención del público se va a centrar en el/la cantante. Aparte de la voz se valoraba el talento en escena. En aquella época todavía se respetaba la figura del frontman. Herederos de Robert Plant, Mick Jagger, Steven Tyler o Bryan Ferry, los frontman llevaban el peso visual en directo, animaban a la gente y si encima tenían buena voz elevaban la calidad de la banda a límites poco antes imaginables. Estos eran tipos como el citado Bono, Sting, Mark Knopfler, Jon Bon Jovi, Axl Rose o un alto y elegante australiano con un toque de evidente sexualidad que respondía al nombre de Michael Hutchence.

“We played every bar, party, pub, hotel lounge, church hall, mining town - places that made Mad Max territory look like a Japanese garden”. (Michael Hutchence)
Michael lideró junto a los hermanos Farris una de las bandas clave de los 80, indispensable para entender a grupos actuales como The Killers o The Bravery, y que inundó de hit singles las radios de medio mundo hasta su trágica desaparición en 1997. INXS se convirtió tras varios años de lento pero continuo crecimiento, en 1987, en la banda más importante del momento gracias a su album Kick. Los 11 millones de discos que vendieron gracias a singles como “What you need”, “Never tear us apart” o “Need you tonight” fueron acompañados por una, otra más, mastodóntica gira mundial.

“INXS never had that groupie thing. No, no we really never did. Not in a sexual way - well, alright, then, maybe years ago”. (Michael Hutchence)
Dos años despues sería X el disco que, plagado de hits como “Disappear”, “Suicide Blonde” o “By my side”, los mantendría en ese puesto privilegiado. Como resultado de la gira de este disco grabaron sus actuaciones en el mítico estadio de Wembley para editarlas luego en video y disco. Estamos ante uno de los grupos que más importancia le daban a los videos y a su imagen visual en el momento en que arracaba la MTV y el mercado de los VHS musicales. Expertos en estos temas, Live Baby Live nos muestra en esencia lo que esta banda era en directo: una apisonadora dirigida por un auténtico superdotado de la escena.

“We’d have to suck away at oxygen canisters between songs just so that we could keep playing”. (Michael Hutchence)
A Michael se le ha comparado miles de veces con Jim Morrison, lo cual es un error, el señor Hutchence era mucho más artista que Jim. Sus actuaciones eran más visuales, más activas y no necesitaba que su público estuviese drogado para valorarlo.

“You know sometimes I just want to curl up on stage and lie there for a while - it's weird”. (Michael Hutchence)
Welcome to wherever you are, con esa preciosidad llamada “Baby don’t cry”; Full Moon, Dirty Hearts y Elegantly Wasted continuaban demostrando la capacidad de los australianos para adaptarse a los nuevos tiempos sin renunciar a su original sonido (otra cosa que no abunda actualmente), pero la desaparición de Michael nos dejó sin poder comprobar si la banda podría llevar a cabo una necesaria vuelta de tuerca para seguir sonando frescos. Porque si algo define a la música de INXS para mí, es la frescura con la que aún suenan temas como “Mystify” o “Taste it” en mi iPod.

Para terminar, lo que muy bien definió N como "el mejor inicio de canción de la historia". Simplemente sensacional.

lunes, 21 de mayo de 2007

The best music of our lives: «The Complete Songbooks», by Ella Fitzgerald

“If you want to learn how to sing, listen to Ella Fitzgerald.” (Vincente Minnelli)
Entre 1956 y 1964 Ella grabó uno de los documentos más importantes de la música popular norteamericana. Su voz de niña, perfecta en lo técnico y en el swing, despachó los libretos de los más importantes compositores estadounidenses de la primera mitad del siglo XX.

“Whatever she does to my songs, she always makes them sound better.” (Richard Rodgers)
Cole Porter, Rodgers & Hart, Duke Ellington, Irving Berlin, los hermanos Gershwin, Harold Arlen, Jerome Kern y Johnny Mercer, interpretados por todos los músicos, intrumentistas o vocalistas, del jazz y el swing, nunca habían recibido un homenaje de tal calibre. Igualándose a las interpretaciones de genios como Louis Armstrong, John Coltrane, Oscar Peterson o Thelonious Monk, por citar a unos pocos, Ella cantaba cada canción con una clase absoluta. Acompañada por una orquesta de cuerda o por pequeñas formaciones de jazz, la pureza y espectacular claridad vocal de Ella se adapta a la perfección a la comprensión técnica y al carácter comunicador de estas melodías. Unicamente Frank Sinatra y Billie Holiday nos han transmitido mejor el aspecto emocional de estas canciones.

“Some kids in Italy call me Mama Jazz; I thought that was so cute. As long as they don't call me Grandma Jazz.”
La gran dama del jazz representa la más alta cumbre en la técnica vocal de este tipo de música, además de ser una dominadora del scat, que sirvió como modo de introducción del bebop en la música vocal.

“I stole everything I ever heard, but mostly I stole from the horns”.
El mayor currículum de la historia del jazz, la cantante más versátil y más solicitada de su tiempo. Un genio a la altura de los más grandes.
De ella, el gran Duke Ellington dijo una vez: “¿Ella?..., Ella Fitzgerald está más allá de cualquier categoría”.

The Complete Songbooks.
Official Site.

Aquí tenemos a Ella en directo con el increible Duke Ellington y su banda en una serie de conciertos históricos que realizaron juntos en el Côte d'Azur en julio de 1966. High class times!



miércoles, 16 de mayo de 2007

The best music of our lives: The Ultra-Lounge music collection

A swinging collection of the coolest music on earth!
Hace tiempo que le tenía echado el ojo a una colección de la que había adquirido un par de discos y me habían dejado impresionado. Bajo el título de “Ultra-Lounge” desde finales de los noventa han salido al mercado una serie de discos que rememoran la mejor música que se podía escuchar en esos ambientes con clase de los locales de diversión de los States en las décadas de los 50 y los 60.

Cool - suave - sophisticated!
Rodeados de mujeres terriblemente atractivas, vestidas con clase, acompañadas de hombres elegantes y poderosos, los cócteles regaban la libertad y la diversión de una clase pudiente, una high-class que tenía estilo y buen gusto. Ya fuese en la última planta del Hotel Plaza en una fiesta privada en una suite con enormes ventanales abiertos a la noche mágica de N.Y., o en un selecto club de Los Ángeles, los invitados se reunían alrededor de pequeñas mesas redondas, sentándose en preciosos sillones de diseño, mientras un piano, un trío o una pequeña orquesta llenaban de múscia esas inolvidables veladas. Personajes de la política, negocios, cine o mafiosos se divertían y relajaban desde su posición en las alturas del poder económico mundial.

Jackpot!
La ciudad del pecado y la diversión era la cuna de estas reuniones. Aquél que tenía dinero y tiempo se pasaba por Las Vegas siempre que podía. Era el centro del espectáculo y por lo tanto el escenario de la música del momento.

An ultra-sonic selection from the coolest music on earth!
Cool. Esa es la palabra. Antes de que sirviese para referirse a cualquier producto musical o de vestir que se pusiese de moda en estos últimos años, era la palabra que definía mejor que nada lo que significaba ir a una fiesta con Frank Sinatra o Marilyn Monroe, bailar al son de Dean Martin y tomarte un dry martini junto a Ava o Cary Grant, ya fuese en una barra redonda o en una piscina de las colinas de Hollywood.

Stick around, you're in Sambatown. Suave!
Viajes a Rio. Al Copacabana. A Cuba. A Florida. La música latina inundando por primera vez la elegancia norteamericana. El jazz deja que Sudamérica se mezcle con él. El swing bebe de la selva. ¡Viva el mambo!

Blame it on the Bossa Nova, Casanova.
La colección consta de 18 volúmenes numerados que abarcan todos los generos: swing, cha-cha-cha, bossa, mambo, y todos los instrumentos: saxo, órgano, piano.
Aparte existen otros nueve discos que no están numerados y que también se caracterizan por su ambiente temático: música para fiestas de navidad nada familiares o canciones de compositores fundamentales adaptadas a este ambiente, como Cole Porter.
Por último también han lanzado una serie de álbumes de artistas, que no están incluidos directamente en la colección pero que son indispensables. Entre ellos está gente como el bestial Louis Prima o la deliciosa Julie London.

Para más información, nada mejor que la página oficial, en donde podréis aprender a realizar los cócteles necesarios para disfrutar al 100% de alguno de estos discos. Enjoy life!

viernes, 11 de mayo de 2007

El tercer ojo del pop rock: Redd Kross

Entre 1990 y 1997 había una banda en L.A. que era simplemente la mejor banda del momento. Mientras la prensa hablaba de Red Hot Chilli Peppers y Jane's Addiction, Redd Kross grababan Neurotica, Third Eye, Phaseshifter y Show World. Y, ¿quiénes son Redd Kross?
Pues básicamente la banda de los hermanos McDonald, Jeff y Steven. Ambos se turnaban en la composición y las voces en unos duetos que recordaban a John y Paul. Tras debutar jovencísimos como una banda de punk en los ochenta, alcanzarían la madurez con Neurotica (1987) en el que abordan el camino power pop que perfeccionarían hasta cotas nunca antes vistas. “Janus, Jeanie and George Harrison” entre otras, reflejaba el talento emergente de ambos hermanitos.
Posteriormente en 1990 graban el genial Third Eye. El pop se adueña por completo de la atmósfera del disco. Ya está, definitivamente habían viajado a 1965 y se habían instalado allí. En esa época graban la película "Spirit of '76", producida por el hijo de Coppola y cuyo vestuario realiza Sofia Coppola, que por cierto, es la chica que aparece desnuda en la portada de este disco.
A pesar de su genialidad el disco no obtiene el éxito que merece, y cuando se creía que no harían nada mejor se descuelgan con esa obra de arte llamada Phaseshifter. Un absoluto must have de la música de los noventa y el mejor album de power pop de la década, sólo igualado por su siguiente grabación, Show World. Con ambos discos el talento de los hermanísimos llegó a cotas inalcanzables para cualquier artista de pop desde entonces. Sé que suena exagerado, pero nadie ha entendido tan bien el legado armónico de los Beatles desde Redd Kross. Su dominio de los coros perfectos y de las construcciones armónicas de las segundas y terceras voces es simplemente aplastante. Si a eso le sumamos un sonido cercano a una banda de hard rock con una actitud increible es evidente que estamos ante una auténtica apisonadora de talento. Posiblemente la mejor "banda menos conocida de los noventa". Imprescindibles. Hay un antes y un después de escuchar canciones como "Bubblegum Factory", "Visionary", Ms. Lady Evans", "Annie's Gone", Pretty please me", "One Chord Progression" o "Vanity Mirror".

Aquí dejo esa pequeña joya llamada "Mess Around". Enjoy life!!!

martes, 8 de mayo de 2007

The best music of our lives: Benny Goodman

Comienzo aquí una serie de entradas que se irán alternando con las aportaciones habituales. Me apetece hablar de música últimamente. Y creo que la mejor forma de hacerlo es empezar a comentar artistas que considero imprescindibles en el desarrollo de la música popular a lo largo del siglo pasado.

Y empezaré por un judío de origen ruso, nacido en Chicago en 1909. El noveno de doce hermanos, Benny obtuvo el carnet del sindicato de músicos en 1923, y apartir de ahí inició una trayectoria de formación en diferentes big bands.
Cuando finalmente lanza su propia big band, se convierte en un ídolo de masas entre la clase media americana. Ésta, que adoraba salir a bailar los viernes y sábados por la noche se rinde a los pies de este clarinetista, que desde el primer momento empieza a grabar auténticos himnos que marcarán la época dorada del swing como "Moonglow", "Sing, Sing, Sing (With a Swing)"o "Stompin' at the Savoy".
El 16 de enero de 1938, Goodman demostró toda la versatilidad y fuerza de su banda en su mítico concierto del Carneggie Hall, en uno de los momentos más importantes de la historia de la música popular americana. Una obra de arte que demostró la perfección que podía alcanzar una banda de swing. Gracias al cielo existe grabación de tan increible evento.

"If a guy's got it, let him give it. I'm selling music, not prejudice."
Durante toda su carrera se convertirá en un auténtico defensor de la integración racial, incluyendo músicos negros en sus orquestas, como el genial pianista Teddy Wilson o el mítico vibrafonista Lionel Hampton. Su exigencia para que tocaran en locales que tenían vedada la entrada a los negros le provocó enormes problemas dentro del negocio de la música popular de la época.

“I remember Glenn Miller coming to me once, before he had his own band, saying ‘How do you do it? How do you get started? It’s so difficult.’ I told him, ‘I don’t know but whatever you do don’t stop. Just keep on going. Because one way or the other, if you want to find reasons why you shouldn’t keep on, you’ll find ‘em. The obstacles are all there; there are a million of ‘em. But if you want to do something, you do it anyway, and handle the obstacles as they come….Even to this day, I don’t like people walking on stage not looking good. You have to look good. If you feel special about yourself then you’re going to play special…Look, what I mean is this: if an individual allows his personal standard to be eroded, something of what he does is going to be compromised. It’s a matter of detail, sometimes when you start losing detail, whether it’s in music or in life, something as small as not sending a thank-you note, of failing to be polite to someone, you start to lose substance”

Tras la II Guerra Mundial, y ante la llegada del Be-Bop, Benny se centró en su faceta de small groups creando una auténtica maquina de perfección integrada por él y nombres como el señor Wilson, Lionel Hampton y uno de sus mayores descubrimientos, el guitarrista y revolucionario del jazz Charlie Christian, palabras mayores.
Durante la Guerra Fría actuó por todo el mundo, sobre todo en Europa y Oriente Medio, llegando a tocar incluso en Moscú, en 1962.
Finalmente, a lo largo de los años '70 y '80 recibiría innumerables reconocimientos en forma de premios y homenajes, todo ello alternado con su continua actividad en directo y estudio. Murió en 1986.

Sin duda estamos ante un imprescindible para entender la música popular actual. Su dominio y perfeccionamiento de las big bands, su tensión rítmica y su perfecta transición a los pequeños grupos que luego se establecerían con el bop le convierten en un músico fundamental. Pero sobre todo ello está la música que grabó. Sé que suena a tópico, pero sinceramente recomiendo ponerse unos cascos y dejar que "Moonglow" o "Sing, sing, sing" hablen por él.

Aquí dejo una grabación al más puro estilo Hollywood. Benny Goodman & his Orchestra con personajes como Krupa a la batería y Harry James a la trompeta, grabados en directo para la película Hollywood Hotel de 1937. "Sing, sing, sing" en estado puro.



En las distintas fotos podemos ver a Benny con personajes como Count Basie al piano, el baterista Gene Krupa o Teddy Wilson.

Discografía*:
- Sing, sing, sing, perfecta recopilación de sus indispensables.
- Live at Carnegie Hall: the Famous 1938 Carnegie Hall Jazz Concert, una obra maestra. Sonido mono, pero aun así es una apisonadora.
- The Complete RCA Small Group Master Takes, una completísima recopilación de sus grabaciones en small group de antes de la guerra.

* Me limitaré a poner dos o tres discos que se puedan conseguir a través de Amazon, ya que al ser artistas que grabaron desde los años 30 o incluso antes, muchas de sus mejores grabaciones se encuentran ilocalizables. Para una discografía más detallada mejor visitar la guía de toda la música: Benny Goodman discography.

Me estás atrapando otra vez

No me suele gustar la música rock en español. Pero con los años he aprendido a reconocer que también se hacen cosas muy interesantes por aquí.
Esto no es reciente, pero esta nueva versión me parece excelente. Como siempre que he escuchado esta canción, el señor Rot la toca como los ángeles. Ariel es un guitarrista superdotado, tiene una clase enorme y además, lo que creo que es más importante, un gusto muy elegante. Su presencia en escena, con su percha y su estilo también hacen mucho, porque no nos engañemos, todo entra mejor por los ojos.

Disfrutar.

jueves, 3 de mayo de 2007

Cuando el amor gobernaba en los campos de la alegría

Rellenar un iPod de 80 gb te permite revisar toda tu colección de cd's y encontrarte con grandes sorpresas, y sobre todo, dejarte llevar por unos recuerdos que creías olvidados.
Ayer por la noche, mientras importaba discos a la memoria de ese precioso aparato me di de bruces con un artista que tenía apartado y defenestrado. Hacía años que no lo escuchaba con calma y había olvidado que, antes de convertirse en un bufón únicamente interesado en salir con modelos había demostrado todo su genio en tres discos perfectos, que le habían encumbrado al panteón de los artistas negros de la época, junto con Prince y Terence.
Entre 1989 y 1993, el señor Kravitz grabó canciones majestuosas, llenas de rock, soul, funk y blues, en una suerte de mestizaje brillante que desembocaba en un pop perfecto. De la noche a la mañana, tras la publicación de Let love rule, se hace un hueco en la élite rock y empieza a codearse con los maestros. Un disco con un sonido digno de las grabaciones de George Martin, en el que la producción y todos los instrumentos corren a cargo del propio Lenny, algo que se convertirá en costumbre y que le une más a su idolatrado Prince.
Posteriormente lanza Mama said (qué gran nombre). Un album tan robusto como el anterior, pero lleno de hit singles. Canciones como "Always on the run", "Stand by my woman", esa pequeña joya de la música contemporánea llamada "It ain't over 'til it's over" o "What goes around comes around" son sólo algunos ejemplos. La colaboración de Slash en el primer single y en la perfecta "Fields of joy" nos hace pensar que nuestro querido genio de la guitarra debería haberse ido con Lenny al salir de los Guns. Menuda pareja. Por cierto, los arreglos de Lenny estaban a la altura de los más grandes.
Finalmente en 1993, ya con una tensión anticipada y con demanda por parte de un público más amplio Lenny publicó Are you gonna go my way, el disco que le consagró definitivamente entre el gran público, pero que, por el contrario, puso fin a su tremenda capacidad de generar clásicos y con el que inició una caída en picado que parece no tener fin. El tema que da título es una construcción potente y directa sostenida en un riff antológico. La épica "Sister", "Is there any love in your heart" o esa delicia pop llamada "Heaven help" vertebraban un disco, si no tan perfecto como los anteriores, brillante en grado sumo.
Después, lo comentado: discos mediocres, con un tema o dos buenos, cambios de imagen ridículos, apariciones en fiestas de la jet, y un ego que parece crecer al mismo ritmo que desciende su talento. Pero eso no nos debe hacer olvidar que a principios de los noventa Lenny era un genio.
Os dejo con el video que me lo descubrió. Recuerdo que fue una tarde, viendo la tele, cambié de canal y lo pillé empezado, pero me quedé maravillado por esa melodía y esa voz. Aún hoy me pone los pelos de punta, menuda canción.

miércoles, 2 de mayo de 2007

Do you have Plans?

Cause you're the only song I want to hear
A melody softly soaring through my atmosphere

"Soul Meets Body", Plans, Death Cab For Cutie

Una breve nota sobre uno de los mejores álbumes que he escuchado en los dos últimos años.
A través de la serie The O.C., he descubierto grandes grupos como The Thrills. Pero sobre todo, he quedado maravillado con Death Cab For Cutie, y su excelente Plans.
Un disco lleno de una dulzura pop presente en todas sus facetas. Tierno y sofisticado, se desliza canción a canción entre letras de enorme ironía y estribillos inolvidables. Canciones que tararearás el resto del día o de la semana.
Desde ese inicio con "Marching Bands of Manhattan" hasta "Stable Song" todo es buena música. Momentos épicos como "Soul Meets Body" o "Someday You Will Be Loved" se entremezclan con joyas para la eternidad como "I Will Follow You Into The Dark", una de las declaraciones de amor más sinceras que he oído en años.
Os dejo con el vídeo de esta última.