La señorita de la Casa del Vino

He’s tried to make me go to rehab
I wont go, go, go.

La letra pertenece a "Rehab", el single que ha lanzado a la fama a Amy. Es una historia real, está basada en las presiones que los miembros de su banda le hicieron para que entrara en un programa de rehabilitación. Y es que Amy bebe mucho y a todas horas. También en directo. No sólo eso. Reconoce haber tenido problemas de anorexia, bulimia y otros trastornos alimenticios. Vamos, un auténtico ser autodestrcutivo.
¿Y qué cantan las personas como Amy? ¿Qué música te lleva del dolor a la pasión más extrema con un ritmo imperturbable y con una libertad absoluta para dar rienda suelta a tu personalidad interpretativa? Soul, babe! La música que demostró la superioridad de la raza negra. Los ritmos que enseñaron a los blancos cómo se debe cantar al amor, al dolor y al sexo. El legado de Marvin, Otis, Sam, Wison, Curtis, Aretha, Supremes, etcétera. La música que siempre quisieron firmar los blancos. El poder y la fuerza del sentimiento sometido al ritmo del corazón. La cabeza y la inteligencia musical está en el jazz, la emoción y la pasión absoluta vive en el soul.
Y hacía tiempo que no salía un verdadero intérprete de soul. Muchos se han visto incluidos en esta etiqueta, pero el verdadero sonido de finales de los 60 y principios de los 70 no había vuelto a aparecer, excepto en contadas ocasiones, hasta ahora.
Amy nos lleva a su casita, a beber vino, a bailar y a cantar sin parar sobre su propia vida, dolor y alegría. Deberíamos sentirnos afortunados. El "alma" es algo de lo que carecen la mayoría de los artistas actuales, y aquí nos la está ofreciendo entera. Pedacito a pedacito. Y es desgarradora.

El video de "Rehab", para que observéis a esta nueva pantera.